Chantaje electoral en Pitres, 1861.

 EL PORVENIR DE GRANADA, 1861.
"A propósito de la elección para diputado a Cortes que tuvo lugar recientemente en el distrito de Orgiva, y en la cual, como nuestros lectores saben, resultó electo el señor José Genaro Villanova, a primera hora del día de hoy, se encontraban en el pueblo de Pitres, 63 electores, los cuales aguardaron en vano la apertura del colegio electoral, porque dadas las nueve y media de la mañana, hora y media después de la en que debió abrirse, aquel continuaba cerrado todavía. Estos electores, procedentes en gran parte de los demás pueblos de la sección, reunidos en el designado como cabella de ella, no podían permanecer mucho tiempo en aquel punto, porque se les combatía de una manera cruel. Pitres era precisamente el pueblo donde algunas simpatías contaba el candidato ministerial, y se pusieron en práctica varios medios, aprovechando influencias de familia.
 
Nos consta  por personas fidedignas, que se les negaba albergue, que no se les vendían comestibles ni en los establecimientos públicos, que aún el agua se les negaba, y hasta dió la fatal coincidencia de que dejara de correr la que servía de abasto común, para que no pudieran proveerse de ella. Es decir, se negó toda obra de misericordia a los electores que, comprendiendo el interés del distrito, cooperaban a él. Imposible era sostenerse en aquella situación. Tan considerable número de personas privadas de tan esenciales recursos, e imposibilitados de votar, tenían precisamente que regresar a sus hogares, que no otra consecuencia podía esperarse de cirscunsancias tan críticas. 

Los electores de la sección de Pitres llegaron a Orgiva, y allí depositaron sus votos en una urna separada. Digno del mayor elogio es un sacrificio, superior a todo encomio esta prueba de resolución y de entusiasmo. A él se debe el trinfo de que hoy se envanece aquel distrito, y del cual la provincia entera reportará ventajas. Por nuestra parte, no podemos menos de dedicarles estas líneas en testimonio de la admiración que nos inspiran. En Orgiva obtuvo la mayoría el señor Villanova. En Lanjarón, casi unanimidad; en esta sección hubo pueblos de más de sesenta electores que le votaron unánimes: en todas partes recibió nuestro candidato inequívocas señales de la consideración en que se le tiene y de las esperanzas que con razón fundan en él los pueblos que le eligen, confiados en su ilustración y en su celo".
 
 

 

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